El lamentable estado de la infraestructura en la Institución Educativa Nuestra Señora del Carmen de Hatonuevo, quedó evidenciado durante la visita de verificación que hizo la Asociación de Educadores de La Guajira -ASODEGUA- y la Secretaría de Salud Municipal, para conocer las condiciones en las que los estudiantes estarían retornando a clases presenciales.

Durante la inspección ocular al colegio, quedaron registros fotográficos y de video que muestran la inexistencia de las mínimas garantías de bioseguridad, ya que no cuentan con agua permanentemente por falta de una turbina para llenar el tanque que suministra el preciado líquido a las diferentes dependencias. Se observó deterioro en algunas de las baterías sanitarias, estando habilitadas solo dos de las mismas.

A esto se suma la maleza alrededor, y el daño causado por un vendaval al techo de la zona deportiva, y en el comedor. Esta comisión verificó que el cielo raso se está cayendo a pedazos, poniendo en riesgo a la comunidad educativa. En ese sentido, los asistentes a la reunión en Hatonuevo coincidieron que las condiciones no están dadas para la presencialidad en la principal institución educativa de este municipio, donde hay tres mil estudiantes aproximadamente.

Ante este panorama, el mismo en muchas otras instituciones del departamento, los miembros de Asodegua reclaman los recursos por el orden de más de un billón 533 mil millones de pesos que el Gobierno nacional destinó para intervenir 689 colegios del país, de los cuales a La Guajira le corresponden más de 5 mil millones de pesos para que sean invertidos en el acondicionamiento de infraestructura y elementos de bioseguridad para recibir a los niños y jóvenes en las instituciones. Al hacer esta verificación los maestros no ven el resultado de dicha inversión en la institución ni en otras de las que hasta el momento han visitado.

Finalmente, surgió la propuesta de que este año escolar se terminara a través de la virtualidad y así haya tiempo de acondicionar la infraestructura física del colegio para que en el 2022 puedan iniciar con presencialidad, además de que los estudiantes cuenten con el esquema de vacunación contra el covid-19.