Por Martha Peralta
Colombia merece un cambio, y el primer cambio es dejar de lado el revanchismo. No es momento de exhibir arrogancia o soberbia de ganadores, nuestras contradicciones con la gente que no votó por nosotros deben ser oportunidades para lograr una Colombia unida. Lo nuestro debe ser la política del amor, vamos por esa paz bonita que tanto nos merecemos. Vamos a construir una Colombia dónde quepamos todos y todas, tenemos que reconciliarnos y dejar tantos odios, cicatrizar las heridas. Es el momento de la paz grande y de trabajar unidos hacía un país sin violencia, sin hambre, sin pobreza, con educación, salud y prosperidad.
Mi total respeto para quienes no votaron por nosotros, nadie tendrá que irse del país, el cambio es primordialmente con ustedes, con esos 10,5 millones de personas que piensan distinto. Y para esos 17 millones de personas que no votaron por ninguna opción, les hago un llamado de responsabilidad y a la unidad. Con ustedes también es el cambio.
Como congresista electa ofrezco mi curul para tender puentes, para buscar el diálogo, para construir en la diferencia. A mi gente en La Guajira todo el cariño, a todos los que me apoyaron, mi agradecimiento, a los que no me apoyaron, seré también su Senadora y pueden contar conmigo.
Vamos a trabajar en unidad por La Guajira. Hay que liberar el Río Ranchería, reemplazar toda la generación de energía fósil, por energías limpias: agua, sol, viento, esto salvará miles de vidas. La Guajira es el departamento que más radiación solar recibe en un año en toda Colombia. Es la más apta para la generación de energía solar y eólica por sus vientos. Hay que comenzar la renovación ya.
Trabajaremos por la seguridad alimentaria, que ningún niño en este país muera de hambre. Lograremos ser mayoría en el Congreso y de la mano del gobierno nacional de Gustavo Petro, conseguiremos entre todos el cambio que tanto necesita La Guajira. Vamos por un gran Acuerdo Nacional que garantice una transformación real de Colombia.